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La vacuna mexicana «Patria» estará lista en 2022 y será más económica

El biológico mexicano Patria estará listo en 2022, se usaría para reforzar el esquema de personas con comorbilidades y en caso de que el covid-19 requiera campañas de inmunización anual. Sección: Nacional

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Cancún.- El covid-19 llegó para quedarse. Con esto en mente, desde el año pasado el gobierno de México emprendió la tarea de desarrollar una vacuna nacional contra el virus SARS-CoV-2, basada en una investigación realizada por la Escuela de Medicina Icahn en Monte Sinaí, en Nueva York, Estados Unidos, de la que México tiene una licencia de uso exclusivo.

Esta vacuna, llamada Patria, reúne los esfuerzos del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), la Agencia Mexicana de Cooperación Internacional para el Desarrollo (Amexcid) y la Secretaría de Relaciones Exteriores; contó con un presupuesto inicial de 150 millones de pesos (mdp), según informó en su oportunidad el canciller Marcelo Ebrard, y se dice que tuvo resultados “extraordinarios” en su primera fase de ensayos.

Desarrollo para la vacuna nacional

Desde el año pasado el gobierno de México emprendió la tarea de desarrollar una vacuna nacional contra el virus SARS-CoV-2, basada en una investigación realizada por la Escuela de Medicina Icahn en Monte Sinaí, en Nueva York, Estados Unidos, de la que México tiene una licencia de uso exclusivo.

“Es un hecho que no la tendremos en 2021”, dice Édgar Pérez, infectólogo de la UNAM. “Por muy cercano que esto parezca, o la velocidad que se le dé, creo que será hasta el segundo semestre de 2022 cuando tendremos resultados de la fase tres y con esto someter la vacuna a una aprobación de emergencia” ante la Cofepris. “Estamos hablando de casi un año, o mínimo entre seis y ocho meses” antes de la autorización del biológico omitir su nombre, también descarta que el biológico mexicano pueda estar listo este 2021, “es muy probable que la aprobación se alcance en el primer trimestre de 2022”. El investigador asegura que, a pesar del retraso en el desarrollo de la vacuna, “los resultados de la fase uno han sido extraordinarios.

Alientan a pensar que la fase dos será igual de exitosa”. El segundo escalón para el desarrollo de nuevas vacunas incluye a entre 200 y 500 voluntarios y el principal aspecto que se monitorea es la seguridad, su eficacia y capacidad de desarrollar anticuerpos con respuesta a diferentes dosis. Por último, se realizan las pruebas de fase tres, que son las más tardadas porque requieren miles de voluntarios y evalúan el efecto de las vacunas contra placebo. Todo biológico nuevo debe aprobar en cada uno de estos rubros para que se autorice su uso de emergencia, dice el infectólogo de la UNAM.

Faltan Recursos para las dosis

“La principal razón para el atraso tiene que ver con el componente económico”, dice el investigador del Conacyt. “Lamentablemente hay un déficit presupuestario importante, que nos impide avanzar con la celeridad que quisiéramos”, agrega.

En contraparte, hace algunos meses el gobierno dijo que se habían invertido 150 mdp en el desarrollo de Patria: 135 mdp procedentes del Conacyt y el resto de la alianza entre la Amexcid y la Cancillería. Estos fondos son insuficientes para las siguientes fases de desarrollo de la vacuna, dice el investigador de la Conacyt.

Estado de emergencia

El martes pasado, durante la conferencia diaria del presidente Andrés Manuel López Obrador, Hugo López-Gatell, subsecretario de Salud encargado de la lucha contra el covid-19 y la estrategia nacional de vacunación, comentó que, si bien la ocupación hospitalaria sigue su tendencia a la baja, “de las personas hospitalizadas, arriba de 95% son personas que no se vacunaron”, y agregó que “la vacunación contra covid es el elemento de protección específica más importante”, pues reduce hasta de 100% la posibilidad de tener casos graves y el peligro de morir por covid-19. “Las vacunas que estamos utilizando en México y que se utilizan en otros países, son altamente efectivas”.

Ante estas certezas, el canciller Ebrard ha dedicado meses a las gestiones para conseguir y comprar dosis suficientes para vacunar a los mexicanos. A principios de la semana pasada anunció en sus redes sociales que se habían recibido en total 106 millones de dosis desde el inicio de la estrategia nacional de vacunación hace nueve meses, una cifra que esperan crezca a 120 millones al cierre de septiembre y a 150 millones para finales de 2021.

Las vacunas que el gobierno de López Obrador puede traer hoy a México, con el aval de la Cofepris para su uso de emergencia, son de nueve marcas diferentes y han costado 33,424 millones de pesos (mdp), informó el secretario de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O, durante su comparecencia ante el Senado de la República, con motivo de la presentación del Presupuesto de Egresos 2022.

Combatir la inequidad global

Si el gobierno trabaja para que todos los mayores de edad estén protegidos contra el coronavirus en octubre y sigue comprando millones de dosis al exterior, ¿qué uso se le daría a la vacuna Patria cuando finalmente esté disponible?

En junio, el canciller Ebrard dijo que América Latina debía desarrollar sus propios biológicos contra covid-19 e incluso contra otros virus que surjan en el futuro, para que “no vuelva a suceder lo que ocurrió en esta ocasión, es decir, la inequidad en el acceso a las vacunas” entre los países más ricos y los de menos ingresos.

El investigador del Conacyt sostiene que sí. “Tenemos la capacidad humana y técnica”.“Tenemos a los mejores investigadores, médicos, científicos a nivel mundial, que podrían estar haciendo investigación con los grupos más importantes del mundo, pero se necesita mucha inversión”.

Por su parte, el investigador del Conacyt lamenta que se escape la oportunidad de que Patria sea la primera vacuna anticovid-19 desarrollada en Latinoamérica. Ese honor probablemente será para la cubana Abdala, que a finales de agosto recibió una opinión favorable por parte de la Cofepris.

Los investigadores del Conacyt y de la UNAM coinciden en que, cuando pase los ensayos clínicos y sea aprobada, la vacuna mexicana podría utilizarse como una dosis de refuerzo para personas con comorbilidades graves o un sistema inmunológico deprimido.

Por ahora, la prioridad del gobierno es vacunar a todos los mexicanos mayores de 18 años, aunque para ello deba asumir un costo económico más alto con la importación de vacunas, mientras Patria avanza en su proceso de ensayos clínicos. “(El desarrollo de) una vacuna puede ser una inversión cuantiosa para un gobierno, pero es barata si se toma en cuenta el beneficio para la población”, dice el experto del Conacyt.

 

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