Cancún. – Varias empresas estadounidenses y europeas están enfrentando llamados a boicots en redes sociales de China, debido a supuestas posturas que han adoptado en el pasado sobre el uso del presunto trabajo forzoso para producir algodón en la región de Xinjiang.
H&M fue criticado por la Liga de la Juventud Comunista y el Ejército Popular de Liberación después de que los usuarios de las redes sociales desenterraron una declaración de la compañía sin fecha sobre acusaciones de trabajo forzoso en Xinjiang.
Los llamamientos para boicotear al minorista sueco, que obtiene 5,2% de sus ingresos globales en China, se extendieron rápidamente para incluir a Nike, que anteriormente comunicó que no obtendrá productos de la región debido a preocupaciones laborales. Los embajadores de ambas marcas en China cortaron los lazos con las empresas en los últimos días.
Se cumple con compromisos de sostenibilidad
H&M China informó que su cadena de suministro global cumple con los compromisos de sostenibilidad y no refleja ninguna posición política. La compañía también dijo que no compra algodón directamente a los proveedores, sino que utiliza a terceros. Esos comentarios hicieron poco para contener la creciente ira en China. H & M no aparece en la plataforma de comercio electrónico Tmall de Alibaba Group Holding, donde el minorista tiene presencia.
La página de Weibo del Beijing Youth Daily enumeró una serie de marcas que han hecho comentarios sobre el boicot del algodón de Xinjiang, incluidas Zara y Adidas. The Global Times, un periódico del partido, también mencionó a Burberry Group.
La portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, Hua Chunying calificó las acusaciones de trabajos forzados de Xinjiang como “mentiras maliciosas fabricadas por anti fuerzas de China”.
Se movilizan las empresas chinas
Las empresas chinas se están movilizando en torno a Xinjiang, que produce más del 80% del algodón del país. Anta Sports Products, el gigante chino de las zapatillas que posee la marca Fila, y Hongxing Erke Sports Products se encuentran entre las empresas que emitieron declaraciones diciendo que continuarán obteniendo el material de la región.
China, el mayor consumidor de algodón del mundo y también el mayor exportador de productos textiles, importa entre dos y tres millones de toneladas al año para satisfacer la demanda. El algodón de Xinjiang se considera de la más alta calidad y el Gobierno chino lo compra a los agricultores para llenar las reservas estatales.