Cancún.- A partir de este 17 de junio de 2025 entra en vigor la conocida Ley Silla, la reforma a la Ley Federal del Trabajo que obliga a los centros laborales a garantizar condiciones dignas de descanso para sus colaboradores, incluyendo la asignación de sillas y áreas adecuadas para pausas laborales.
El sector restaurantero está preparado
Ante ello, la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac) en Quintana Roo aseguró que el sector restaurantero está preparado para cumplir, aunque urgió a las autoridades a enfocar sus esfuerzos en la informalidad.
El presidente de Canirac Quintana Roo, Julio Villarreal Zapata, señaló que si bien la normativa ya es oficial desde este martes, existe un periodo de 180 días para que las empresas ajusten sus reglamentos internos de trabajo y espacios físicos, por lo que el organismo se encuentra ya trabajando con sus agremiados para facilitar la transición.
“Estamos listos para implementarla. Vamos a dar cursos de capacitación a los más de 1,300 restaurantes afiliados en el estado para enseñarles cómo adaptar sus reglamentos internos y áreas de descanso conforme a la ley”, explicó Villarreal.
Falta claridad en reglamentos complementarios
Aunque el artículo reformado de la Ley Federal del Trabajo ya está vigente, Villarreal subrayó que aún falta la publicación del reglamento que detallará aspectos clave como los tiempos específicos de descanso, si serán escalonados, y bajo qué condiciones exactas deben cumplirse.
“Hoy sabemos que el descanso mínimo es de 30 minutos, pero no se ha establecido si será cada tres horas, cada turno, ni se han especificado los criterios técnicos. Necesitamos que ese reglamento se publique cuanto antes”, expresó.
No representa un desafío mayor: Canirac
Villarreal reconoció que, al tratarse de un sector que naturalmente cuenta con mobiliario suficiente para atender a comensales, la implementación técnica de la Ley Silla no representa un desafío mayor para la mayoría de los restaurantes formales.
“Asignar un espacio para que meseros, cocineros o garroteros puedan descansar no es un gran reto para nosotros. La mayoría de los agremiados ya están cumpliendo”, afirmó.
A pesar del cumplimiento generalizado entre los afiliados a Canirac, el presidente de la cámara expresó su preocupación por los negocios informales, que representan, según datos del INEGI, más del 50% de los establecimientos en México.
“Nosotros estamos cumpliendo con todas las disposiciones. Pero el gobierno debería mirar también a los negocios informales que no ofrecen seguridad social, prestaciones ni cumplen normas laborales. Si no, terminamos siempre exprimiendo la misma naranja, que tiene jugo limitado”, dijo con firmeza.
Las sanciones por no cumplir con la Ley Silla oscilan el equivalente de 250 a 2.500 veces la Unidad de Medida y Actualización (UMA). y aunque Villarreal considera que no se trata de una ley difícil de aplicar, advierte que su implementación debe evitar generar espacios para la corrupción o extorsión, especialmente en sectores donde sí podría haber más complicaciones operativas, como en gasolineras u otras industrias.
“Estamos trabajando de la mano con la Secretaría del Trabajo para evitar cualquier tipo de malentendido y capacitar a todos los restauranteros. No vemos que esto pueda detonar corrupción en nuestro sector, pero hay que vigilar su aplicación en todos los giros”, agregó.
Finalmente, Villarreal reiteró el compromiso de Canirac con el cumplimiento de la legislación laboral y destacó que los cursos de capacitación comenzarán en los próximos días. El objetivo es que ningún afiliado incurra en incumplimiento por desconocimiento, y que el cumplimiento de esta nueva disposición se realice con orden, planeación y justicia laboral.
“Estamos comprometidos con el bienestar de nuestros colaboradores, pero también pedimos equidad en la vigilancia. El cumplimiento de la ley debe ser parejo, tanto para quienes están en la formalidad como para quienes aún operan fuera de ella”, concluyó.