«La ambición es el último refugio del fracaso», escribió el talentoso escritor irlandés Oscar Wild;, Marybel Villegas Canché se encamina directo, sin escalas a su segunda derrota en busca de la candidatura de Morena a la presidencia municipal de Benito Juárez.
Tras pedir licencia una vez más al Senado de la República – la primera en 2021 cuando intentó ser alcaldesa, la segunda al buscar la gubernatura en 2022 y, ahora, con el interés puesto de nuevo en el municipio de Benito Juárez, de inmediato se victimizó al acusar maltrato en el interior del partido que la llevó a la máxima tribuna del país.
La estrategia no es nueva en ella, hacerse la víctima inventando historias dignas de programas conducidos por Laura Bozo, es parte del protocolo en su carrera política, pero no le queda de otra los números de plano no le dan para alcanzar la tan ansiada candidatura.
Sabe que la campaña mediática que utilizó para posicionarse a fin de ganar la encuesta, así como los ataques en redes sociales en contra de su principal adversaria, la alcaldesa Ana Patricia Peralta, quien busca reelegirse, no le sirvieron de nada.
Tampoco que en el Tribunal Electoral de Quintana Roo sus vasallos, el Magistrado Presidente, Sergio Avilés y Demeneghi y su incondicional, la Magistrada en Funciones, Maogany Crystel Acopa Contreras, la ayudaran en diversas sentencias.
Envalentonada, Marybel Villegas aseguró en un comunicado que hizo llegar su equipo de prensa que «me veo en la boleta, lista para seguir trabajando por el bienestar común como una aspiración profesional».
El partido Más Apoyo Social ya la invitó a sumarse, si lo que quiere es estar en la boleta el MAS es una opción o tal vez el PRD que busca desesperada una persona que lo encabece en vísperas de desaparecer.